Luna azul

Julieta se encontraba en un salón adornado con una antigua araña con todas las velas encendidas
atestada de gente con vestimenta elegante cuando percibió que un militar muy alto vestido de gala la observaba atentamente, su mirada era enigmática y perturbadora. Entonces sintió que caía lentamente girando y girando hasta tocar el frío suelo. 

Había caído de su cama en cámara lenta con la inclinación de su colchón, liada entre sábanas y almohadas dispersas, sin diferenciar aún el sueño de la vigilia, intento ubicarse en la oscuridad, cuando distinguió una sombra en su ventana, antes que pudiera gritar del susto, su hermano Dante le dijo:

-¿Qué haces en el suelo?

- y vos qué haces en mi ventana a estas horas? -respondió fastidiada Julieta.

Sonriendo por la absurda escena de ver a su hermana despeinada, sentada en el suelo y liada en las sábanas le dijo: - está por amanecer, sólo quería dejarte las llaves de tu auto, que tengas un buen día hermanita -dicho esto Dante dio media vuelta y se marchó.

Lentamente se incorporó para iniciar la rutina diaria, preparaba con lentitud ritual el desayuno, el noticiario de fondo anunciaba que el matrimonio igualitario se había aprobado en los Estados Unidos y se relataba los pormenores de la construcción de un enorme altar de maíz y otros preparativos para la venida del Papa en Paraguay, té con aroma a canela, pan tostado y la justa dosis de azúcar para iniciar la jornada.

Llegó a la guardería donde ya se escuchaba la algarabía de los niños que la esperaban sonriendo y expectantes para inventar nuevos juegos y escuchar sus famosos cuentos fantásticos y siempre exagerados, estaba contando la sexta versión personal del cuento Barba Azul cuando la Directora de la Escuela entró al salón de clases y le dijo: tu madre está en línea, dice que Fausto está atrapado en el tejado de la vecina evangélica que por cierto lo odia. Fausto era un gato elegante, indiferente al mundo entero que odiaba a los escandalosos perros de la cuadra y a los que evitaba como a la peste, por lo visto esta vez se metió en un buen lío, interrumpido el cuento, los niños dieron permiso a su Maestra  para que proceda a rescatar a su amado gato.

Luna  Azul se publicó en el libro colectivo "Entre todos 3"
 el 10 de junio de 2017 en Asunción, Paraguay

Encontró su cuadra llena gente; vecinos curiosos, estudiantes que regresaban a sus casas, bomberos y vendedores de escobas, la vecina evangélica discutía con su madre, mientras un bombero intentaba rescatar a Fausto, el gato observaba el espectáculo desde la cima del tejado esperando sin apuros su rescate y fue entonces cuando sintió el peso de una mirada, el conductor del camión hidrante que hasta ese entonces daba órdenes desde su teléfono celular, la miraba fijamente, bajó de un salto con una seguridad que no dejaba lugar a dudas que era el jefe de la brigada, todos los presentes se abrieron paso automáticamente para dejarlo pasar, subió la escalera improvisada y en tres zancadas, estiró el brazo y Fausto se acercó a él dócilmente, dejándose bajar como si fuese un Rey, dos segundos después Fausto estaba de vuelta en tierra firme y en los brazos de Julieta.

Julieta lo miró desde sus 1,55 cm de estatura y al contemplarlo lo reconoció, era el militar de su sueño vestido de bombero voluntario, siguió un silencio que hablaba por si mismo mientras Fausto miraba a Julieta y al bombero por turnos. ¿Qué decir cuando ya todo se ha dicho?

Semanas después, en una noche de luna azul, un militar que en sus tiempos libres era bombero voluntario la invitaba a bailar.